domingo, 24 de mayo de 2020

Miguel



Amo tus células que cabalgan y vuelan
desde la más grande hasta la más pequeña.

Tus unicornios y dragones que habitan en tus cuevas
y se posan, con delicadeza, en el ángulo abismal de tus pestañas.
Amo tus precipicios cuando caigo en tus abrazos de olas
 y resbalo, sin miedo, en las laderas vertiginosas de tus montañas.

Amo tus serranías y picos. Tu boca de incesante lluvia.
Amo tu río caudaloso de venas y tus arterias preciosas de manglares.

Amo tus ojos de bosque y tus barbas de selvas
 con poderosas lianas
donde se mecen las olas.

Amo tu pecho, 
tu corazón que late al ritmo de los planetas.

Amo tu naturaleza de nubes y tormentas.
De mareas y rayos.
De rocío, sabiduría y calma.

Te amo…
Miguel…

viernes, 22 de mayo de 2020

Contrastes


Al asomarnos
 justo
cuando
 los rayos
se aproximan
perpendiculares.

Es posible
 admirar
el milagro
 de un contraste.

Aquel 
cuando la luz
crea la sombra,
con la materia
que atraviesa
y roza.

Nos muestra
 la perfección 
de las formas
de las líneas
y curvas.

Toma fuerza
mientras dura
el momento
de la entrega,
donde
la belleza
se observa
en el preciso 
contraste.

viernes, 15 de mayo de 2020

Ojos



¿Y si tuviésemos
solo los ojos
para comunicar?
¿Aunque
no viésemos?

Entonces, cada mirada
la perdida,
la distante,
la olvidada,
cobraría
un valor
aún mayor
que las palabras.

Al observar
con amor y ternura,
la mirada volvería:
retornaría de un viaje
con esa respuesta
que sana
ama,
manifiesta,
acompaña.

Serían, entonces,
nuestra miradas
escenarios de paz:
lugares del juego,
rascacielos de luz.

Darían fuerza,
calma...

sábado, 9 de mayo de 2020

Permite


Sorpréndete.
Suelta.

Nada.
Todo.
Incluso.
Vacío.
Marea.
Río.
Vertiente.

Camina.
Despacio.
Vuela.
Estático.

Veras.
Ocurre.
Palpitas.

¡Milagro!
Eres….

¡Ama!
Ser…

Libre.

martes, 5 de mayo de 2020

Somos selva


Habitantes del cielo,
somos selva...

La selva habita

en la nube,

en la lluvia,

en tus lágrimas,

en tus risas.

Habitas en el cielo.

Haces parte de ella.

Somos selva...

sábado, 2 de mayo de 2020

Yo amor


Al ingresar en mí,
descubro mi abdomen 
mullido de sentires.
El tórax suspendido en el viento.

Mi interior poco a poco levita,
no se detiene.

Es peregrino entusiasta
de corazón alegre, 
rumbo a su propia misión.

De pronto mi coloración cambia,
adquiere el color del sol.

La naturaleza refleja 
mis tejidos córneos,
los segmentos húmedos,
fluidos, cristalinos,
mi sabor salino,
mi plasma en ebullición 
y creativo.

Entonces, en el continuo 
roce de las hojas,
mi lenguaje danza,
se sacude y pronuncia…
"Yo, amor".

Yo soy


En el abrir y cerrar del vuelo de tus pestañas
te descubrí divino.
Estabas revestido de un hábito invisible, 
del fulgor boreal y arcoíris
al movimiento de tus alas.

En el aleteo de tus párpados de nectarios
se posó mi silencio:
se mezcló con el rocío de algunas lágrimas.

Reventamos, cual crisálidas libertarías,
en el tránsito de emerger.

Entonces, presentí la bondad de tu vuelo,
tus alas fuertes y delicadas rumbo al sol, 
a la fuente de tu luz.

Volamos, 
al vaivén de los labios,
y en el sonido del tambor de tus latidos
pronunciamos
Yo soy…