miércoles, 17 de abril de 2019

Cree


Nació,
umbilical, pálida
de ojos bruñidos.

Abandonó,
refugios ocultos
sin rayos de luz.

Soltó, 
liberó,
sus pasos de siglos.

Hiló,
sencillos tejidos
caminos livianos.

¡Valiente!
Creyó.

Abrió 
sus baúles.

Extrajo 
de sí
anhelos eternos.

Gestó…
Sus hijos, deseos,
nacieron de sí.

Bebieron, del agua,
su alma de viento.

Crecieron,
sin prisa,
espíritus alud.

Así, convergieron, 
sin pausa y con tiempo.

Voraces, sutiles:
sagrados milagros.